25 ago 2010

Macrorrueda de Negocios de Cúcuta dejó cerca de US$4,6 millones

Al concluir la macrorrueda ‘Frontera Productiva’, en la ciudad de Cúcuta, el Vicepresidente de Exportaciones de Proexport, Ricardo Vallejo, presentó un balance positivo de la jornada, que generó oportunidades de negocios por 4,6 millones de dólares.
Durante la macrorrueda se realizaron 730 citas de negocios, cifra que superó las expectativas estimadas en 650 citas. Dichos encuentros se llevaron a cabo entre los 177 empresarios colombianos asistentes y 46 compradores procedentes de nueve países.
Los mercados con mayores expectativas de negocios fueron: Guatemala, con una participación del 54 por ciento, lo que representa operaciones por 2,4 millones de dólares; México con 22 por ciento y negocios por 1,1 millones de dólares; República Dominicana con 10 por ciento que equivale a negocios por 451 mil dólares, y Ecuador con nueve por ciento, representado en operaciones por 402 mil dólares.
Por sectores, la mayor demanda se presentó en manufacturas con el 62 por ciento de las oportunidades de compra totales, lo que representa transacciones por 2,8 millones de dólares. Prendas de vestir registró el 38 por ciento, con expectativas de negocio por 1,7 millones de dólares.
Vallejo resaltó que el 80 por ciento de los compradores internacionales que participaron en el evento visitaron por primera vez a Colombia para conocer la oferta de la región. También destacó que "esta jornada da cuenta de expectativas significativas para el incremento de las relaciones comerciales de Cúcuta y Norte de Santander con nuevos mercados internacionales"
El Espectador.com

Proveedores, a vender sin IVA a las fronteras

Los comerciantes y empresarios de Cúcuta celebraron la expedición del decreto 3148 del 23 de agosto de 2010, por el cual el Gobierno Nacional precisa los alcances de la exclusión del IVA para bienes que se venden en los 37 municipios de la zona fronteriza con Venezuela, como parte del plan de choque adoptado a finales de julio pasado por la entonces administración del Presidente Álvaro Uribe ante la difícil situación económica y social derivada de la crisis en las relaciones de los dos países.

El Consejo de Ministros del pasado lunes en Bogotá acordó que los proveedores de los comerciantes de las ciudades fronterizas tendrán que descontar de igual forma el gravamen en las transacciones durante los cuatro meses de vigencia del decreto que sobre el particular se expidió al amparo de la Emergencia Social. 
 
La precisión se tomó debido a que comerciantes y empresarios expresaron su descontento con la medida que excluye el pago de IVA a algunos sectores productivos, al considerar que el gran peso cayó sobre el comercio que compra productos con ese impuesto y lo vende luego sin él, lo que les estaba generando pérdidas en renta y capital de trabajo.
 
Es así que los comerciantes de Cúcuta manifestaron que ya agotaron inventarios y aseguraron que algunos productos no están en el mercado porque al traerlos de otras regiones del país, tiene un costo de IVA que deben asumir los vendedores en detrimento de su flujo de caja.
 
Para el gerente de Peñalosa Corona, Juan Esteban Peñalosa, “el problema eran dos cosas. El decreto 2799, expedido el 3 de agosto, nos obligaba a vender sin facturar IVA, pero no aclaraba que nosotros pudiéramos comprar igualmente sin IVA. Eso significaba que estábamos comprando con un 16 por ciento de IVA pagado al proveedor y lo teníamos que descontar en la venta, convirtiéndose en un flujo de caja negativo simplemente por el hecho de hacer esa venta”. 

Agregó que “por otro lado, el 16 por ciento pagado al proveedor representaba, en los cuatro meses de vigencia del decreto, más de 50 por ciento del capital de trabajo utilizado, es decir, un empresario que compra 100 millones de pesos a un proveedor el primer mes le pagaría 16 millones de pesos, el segundo mes otros 16 millones, y el tercero igual. Al cuarto mes habría pagado un total de 64 millones de pesos. Si el comerciante tuviera 100 millones de pesos de capital de trabajo pues quedaría únicamente con 36 millones de pesos, situación que es el gran problema la descapitalización de los empresarios de la región”.
 
De igual forma, Gonzalo Téllez, miembro de la junta directiva de la Cámara de Comercio de Cúcuta aseguró que lo importante del decreto del Gobierno es que “un empresario que está en la zona de frontera y compra a un industrial, por ejemplo de Medellín, artículos como alimentos, materiales de construcción, confecciones, ellos deben facturar sin el IVA como si fuera un proceso de exportación, por eso era fundamental autorizar a las empresas para que vendan a las ciudades de frontera sin facturar el IVA”.
 

Afectaba a los empresarios

 
Pedro Sayago, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Cúcuta, aseguró que la exclusión del IVA, adoptada por la emergencia social que afronta la zona, aplica para productos como calzado, confección, materiales para la construcción, electrodomésticos y productos de hogar. “Las empresas del interior del país estaban facturando el IVA en sus despachos y para el pequeño comerciante o empresario le quedaba muy difícil su devolución”, indicó.

La Opinión.com

El plan maestro de Eldorado no da espera', dice el presidente del Grupo Odinsa, Luis Fernando Jaramillo


El funcionario señala que en cinco años la infraestructura vial y de transporte del país tendrá "otra cara".
Diez años de experiencia en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en las áreas que evalúan los proyectos de infraestructura de América Latina, haber sido ministro de Obras del presidente Virgilio Barco y 11 años al frente del Grupo Odinsa han convertido a Luis Fernando Jaramillo Correa en un referente a la hora de hablar de infraestructura.
Y como experto en un tema donde la planeación y la anticipación no pueden estar ausentes el directivo muestra desde ya su preocupación, porque todavía no es claro el panorama para el aeropuerto Eldorado en el largo plazo, es decir, dentro de 12 años.
Al participar en la sesión de 'Lecciones Empresariales', que organiza PORTAFOLIO, el directivo advirtió que es urgente trabajar en la definición de un plan maestro para la principal terminal aérea del país, que contemple desde ya la construcción de otras dos pistas con sus respectivas terminales, para que entren a operar en el 2022.
Jaramillo argumenta esta urgencia con cifras y datos: el último plan maestro fue hecho en el 2000, cuando había alrededor de 4 millones de pasajeros anualmente. Este año las proyecciones apuntan a que se cerrará con 17 millones de pasajeros.
Agrega que cuando en el 2007 el consorcio Opaín, liderado por el Grupo Odinsa, ganó la concesión para la remodelación del terminal aéreo, se movilizaban 11 millones de pasajeros y todo indica que con la llegada de las nuevas aerolíneas como Aeroasis (LAN Chile), La Nueva Aerolínea, el retorno de Lufthansa y las aerolíneas de bajo costo norteamericanas dará acceso a un avión a la población que tradicionalmente no volaba.
"El punto central es que no hay un plan maestro actualizado, con graves consecuencias, no sólo por la falta de adecuación de sectores como Fontibón y Engativá, que tienen un gran potencial de carga y que deberían ser adecuados para tal fin", reitera.
NO HAY AVANCE
Según Jaramillo, en cada oportunidad que tuvo le dijo al ex presidente Uribe que no se había hecho este plan maestro y, a pesar de que el director de la Aeronáutica Civil decía que el proceso estaba avanzando, "la realidad es que al día de hoy no se ha hecho nada".
A su juicio, la importancia que tiene Eldorado para la economía nacional hace que sea preciso estructurar dicho plan, con el apoyo de las mejores firmas de tecnología aeroportuaria del mundo. Se calcula que con las dos pistas actuales Bogotá tendrá capacidad de operación hasta el 2022 y después de eso se van a necesitar otras dos adicionales, por lo que hoy es vital que se comiencen a separar los terrenos, para comprarlos y mantenerlos en reserva hasta cuando sea el momento de la construcción.
"Por eso hay que comenzar ya, porque después los terrenos se volverán incomparables", dijo el directivo, quien señala que si bien el aeropuerto Eldorado puede atender fácilmente 35 millones de pasajeros al año, hay que programarlo para los próximos 25 años.
CINCO AÑOS CLAVE
Los expertos en infraestructura no dudan en afirmar que el país ya despegó en este frente, lo cual ratifica Luis Fernando Jaramillo, quien considera que los proyectos que dejó sembrados el gobierno pasado van a ser muy importantes para el futuro.
"La política, de terminar lo que está contratado y emprender únicamente nuevas obras que tengan buenos estudios, es sabia. Pero al mismo tiempo desde ya se debe realizar una preparación muy fuerte para iniciar nuevos procesos licitatorios con obras estudiadas y con diseño final", indicó.
Jaramillo es optimista sobre el desarrollo de la infraestructura en el mediano plazo, ya que dentro de cinco años estarán concluidas obras como la Ruta del Sol, que va a desembotellar la comunicación con la Costa Atlántica, así como la malla vial del Valle del Cauca y la del Eje Cafetero.
También deberán estar en pleno funcionamiento la red aeroportuaria, que además de Eldorado incluye a los demás terminales que están en concesión. A lo anterior se suma una red portuaria con mayores niveles de eficiencia y un sistema de dobles calzadas y autopistas que "le van a cambiar la cara al país".
Mientras las autoridades distritales y nacionales avanzan y discuten sobre la construcción de la primera línea del Metro para Bogotá, Jaramillo dice que ya es hora de proyectar una capital más moderna y eficiente en movilidad, por lo que las vías elevadas, al estilo de las de Bangkok (Tailandia), son el siguiente paso, ya que en esta materia los medios se complementan.
"Hace muchos años Bangkok sufría un caos vial muy fuerte, pero a finales del año pasado volví a esta ciudad y ahora está llena de superautopistas elevadas que resuelven el problema significativamente y dan agilidad", aseguró.
El futuro de Odinsa se escribe con 'I'
En 11 años el patrimonio del Grupo Odinsa pasó de 11.000 millones de pesos a más de 419.900 millones (al corte del 2009), avance que según su presidente, Luis Fernando Jaramillo, se aceleró con la entrada al mercado bursátil en el 2005, que le ha permitido proyectarse dentro y fuera del país.
Por ello el futuro de esta compañía, que hoy tiene 500 accionistas, se escribirá con la letra 'I', ya que la apuesta por la innovación y la internacionalización es total. Además del bulevar turístico en República Dominicana y el aeropuerto de Tocumen en Ciudad de Panamá, el Grupo está precalificando para hacer parte de proyectos en Puerto Rico, Trinidad y Tobago, así como en el Perú.
Al mismo tiempo, tras haber hecho parte del proyecto de Internet rural Compartel, la firma se alista para extender este modelo en países como Perú, Brasil y México. Odinsa también está asesorando al grupo ruso que presentó propuesta para el proyecto del satélite colombiano.
300 mil millones de pesos son actualmente los ingresos de la empresa, de los cuales el 30 por ciento se genera fuera del país.
Portafolio.com